El Madrid se lleva el Clásico en la segunda prórroga (90-97)

En vísperas del 125 aniversario del FC Barcelona, el equipo azulgrana pagó su falta de ideas a la hora de la verdad y se apoyó, sin éxito, en consecutivos despejes forzados en el perímetro. Sin embargo, el escolta Kevin Punter (27 puntos) y el pívot Jan Vesely (20 y 8 rebotes) fueron sus jugadores más relevantes. El Palau Azulgrana acogió el clásico más imprevisible de los últimos tiempos, dada la irregularidad que precedía tanto al Barça, octavo tras dos tropiezos europeos encajando bastante más de 100 puntos, como al Madrid, décimo con un pleno de derrotas en cinco partidos a domicilio en la Euroliga.

Empezó mejor el equipo blanco, sólido en defensa ante la falta de ideas y el abuso del equipo catalán, que empezó lo suficientemente lento en el otro extremo de la cancha como para contener dos triples de Rathan-Mayes y las asistencias de Campazzo para alimentar las canastas fáciles de Tavares y Hezonja en la pintura (6-14, min6). La garra de Vesely, con seis puntos seguidos, activó al Barça, que apretó el marcador al final del primer ataque (17-19). Con las segundas entidades en pista, el equipo de Peñarroya subió la intensidad en defensa para secar al Madrid y volvió a la carga, liderado por Núñez y Brizuela (26-22, min14).

Entonces se produjo el debut del nuevo fichaje azulgrana Raúl Neto, que anotó un triple y una bandeja en sus 2 primeros lanzamientos. Sin embargo, el equipo de Chus Mateo no se dejó intimidar. Feliz y Musa frenaron la escapada local con 2 triples, y el regreso de Campazzo y Tavares devolvió el orden al equipo blanco (33-34, min17). Vesely, máximo anotador de la primera parte con 12 puntos, volvió a penetrar para devolver la ventaja a los blaugranas al descanso con 4 puntos consecutivos (38-34). Tras 2 cuartos de poca fluidez ofensiva, sobre todo por parte madridista (7/17 triples), el tercer cuarto fue exactamente igual que el primero. el tercer ataque fue exactamente igual.

Hasta que llegó el momento de Hezonja. El croata monopolizó el ataque blanco y, negado desde el perímetro (1/5), volcó su juego a la zona para impulsar la remontada visitante con diez puntos (45-49, min27). En ataque, el Barça movió bien el balón, pero falló en todas las situaciones. Fue el regreso de Brizuela, con 4 tantos, lo que desató a los blaugranas y devolvió la igualdad al duelo, que llegó al último cuarto con mínima virtud madridista (52-54).

Se acercaba la hora de la verdad y apareció el de siempre, Llull, con cinco puntos seguidos y una asistencia a Tavares, para impulsar al Madrid, pero el Barça respondió de forma coral, sólido atrás y liderado en ataque por Vesely y Punter, que enlazaron seis puntos para poner a los blaugranas en virtud a falta de 1:44 (69-66). En un final tenso, con constantes revisiones arbitrales, 2 tiros libres de Punter dieron al Barça una ventaja de tres puntos a falta de 20 segundos en el reloj, Tavares recortó la ventaja a un punto, Parker lo hizo desde la línea, Campazzo empató con un triple a falta de dos segundos y Parker falló el tiro que habría evitado la prórroga (74-74).

Con el viento a favor, el Madrid empezó mejor (74-78), pero los blaugranas se levantaron con Punter (80-80). En otro final vibrante, Abrines falló un triple libre y Musa, en la acción posterior, perdonó el triunfo blanco en el último tiro. Hubo un segundo tiempo extra y fue totalmente dominado por el Real Madrid. Campazzo tomó el mando del partido, anotó y alimentó a Tavares y Hezonja, mientras el Barça, sin respuestas desde el tablero, se perdía en aclarados y tiros inverosímiles desde el perímetro, bien protegido por los de Chus Mateo (90-97).