Las campeonas arrancan con una victoria trabajada ante Deportivo Abanca (0-3)
Fantástico inicio de temporada liguera para el Barça. En un escenario inmejorable, Riazor, los campeones iniciaron la defensa de su título con una victoria por 3-0 ante un valiente Depor, que sin duda será un rival a tener en cuenta esta temporada. Un doblete de Pajor, que demostró ser el killer que necesitaba este equipo, y otro de Brugts, uno de los mejores del partido, abrieron el telón de una temporada en la que el equipo quiere volver a ganarlo todo.
Ante el Depor, en su primer once oficial, Pere Romeu priorizó al resto de olímpicas, con mucha carga acumulada este verano y la temporada pasada. Alexia, Aitana, Patri y Ona empezaron en el banquillo y eso dejó un centro del campo poco habitual, con Walsh, Caño y Kika. Jana y Brugts en las bandas, Mapi y Engen en el centro de la zaga, y el tridente atacante de Graham, Pajor y Rolfö.
Durante toda la primera parte, a pesar del control de balón del Barça, faltó dinamismo y juego interior. El Depor, con un planteamiento capaz, tapaba bien para que ni Graham, ni Rolfö, ni Pajor pudieran recibir con comodidad. Y la ocasión más clara fue un saque de esquina de Mapi que se envenenó -con toda la intención- y se estrelló en el larguero.
Emocionado y satisfecho por el trabajo realizado, el Depor celebró el empate sin goles en el descanso con una piña y abrazos de los jugadores. Fue como una victoria para ellos. Pere Romeu, sin embargo, no quiso esperar para hacer cambios. Dio entrada a Alexia y Aitana -por Kika y Caño-, que cambiaron la cara a su equipo.
En la primera acción, el Barça informó ahora. Y el Barça no tardó en marcar. Marcó Pajor, aprovechando el rechace de Pereira tras un primer remate de Graham y después de un gran centro de Mapi, que volvió a aportar ese toque ofensivo que la convierte en una central diferencial. Un golazo total de la jugadora polaca. Minutos después, Brugts marcó el segundo, tras un pase de Alexia. Un balón maravilloso con música.
Con el Barça satisfecho y el Depor cansado, parecía que las cosas se iban a quedar ahí. Hasta el momento en que apareció de nuevo Pajor. El polaco marcó el tercer y definitivo gol. Un golazo con asistencia de Graham.